El Hombre de Acero puede saltar altos edificios de un solo salto, detener poderosas locomotoras y atrapar balas a toda velocidad, pero ¿puede ser negro?
Henry Cavill ha abandonado su turbulenta etapa como Superman y ha dejado un hueco en el universo cinematográfico de DC. En la carrera por reemplazar a Cavill como el Hombre de Acero en la profundamente mediocre franquicia de Warner, Michael B. Jordan ha surgido como un candidato potencial. Sería un recasting interesante y dramático, que casi seguro rompería internet, pero ¿el casting de un actor negro como uno de los personajes más famosos, más icónicos y, notablemente, blancos, sería una buena idea?
La idea de un Superman negro no es nueva. Ya ha habido Supermanes negros y dobles de Superman en la historia del cómic. En Reign of the Supermen de principios de los 90, John Henry Adams como Steel sustituyó a Superman, tras su muerte. El Superman de Tierra-Dos (una de las muchas, muchas tierras del multiverso de DC) es Val Zod y es negro, y el controvertido libro Strange Fruits se pregunta: «¿Qué pasaría si un Superman negro se estrellara en el Mississippi de Jim Crow?»
Potencialmente, Jordan podría interpretar a uno de estos personajes. Al igual que la posibilidad de que el Sam Wilson de Anthony Mackie pueda -¡no, deba! – sustituya a Chris Evans como Capitán América, o que un actor aún sin nombre pueda entrar en el Universo Cinematográfico de Marvel como Miles Morales, un nuevo personaje que adopte el nombre de Superman parece la mejor manera de hacerlo.
Pero como los hombres-bebé que viven en sótanos y tienen la fortaleza emocional de un pañuelo de papel mojado pierden su mierda colectiva ante cualquier cambio en su preciado club de chicos pastosos, un personaje sustituto es tan arriesgado como un personaje de raza cambiada en términos de reacción de los idiotas. Y, parece poco probable que renuncien a uno de la trinidad de DC (Superman, Batman y Wonder Woman) y al reconocimiento de marca de Clark Kent para sustituirlo por un personaje oscuro y difícil de explicar que no tiene tantos seguidores como El Halcón o Spider-man.
El Clark Kent blanco tiene el privilegio de ser un granjero de 1,80 metros, con la constitución de un mariscal de campo de las estrellas, así como un respetado reportero de un importante periódico
Entonces, digamos que tenemos un Clark Kent de raza cambiada, ¿qué significa eso para el personaje de Superman? En qué se diferencia crecer en Kansas, un estado con sólo un 5,9% de población negra, para los negros en comparación con los blancos? ¿Cómo trata el mundo al Clark Kent negro? El Clark Kent blanco tiene el privilegio de ser un granjero de dos metros y medio, con la constitución de un mariscal de campo, así como un respetado reportero de un importante periódico. Esto no quiere decir que no haya periodistas negros y atléticos del cinturón bíblico que no tengan una moral perfecta, sólo que el camino para llegar a esa posición sería diferente debido al racismo sistemático al que se enfrentarían.
¿Y qué hay de la forma en que el mundo ve a Superman? Sería difícil creer que un ser parecido a un dios de otro planeta no inspiraría odio si fuera negro. En nuestro propio mundo, los negros -especialmente cuando encarnan la verdadera excelencia- son rutinariamente discriminados y vilipendiados por la sociedad. Barack Obama es objeto de conspiraciones y proclamas de ser el portador del apocalipsis porque se convirtió en el hombre más poderoso del planeta, mientras que Colin Kaepernick acaba de arrodillarse durante una canción y los blancos literalmente prendieron fuego a la ropa que ya habían pagado en señal de disgusto. Imagina lo que harían si pudiera volar, o si Obama pudiera partir meteoritos por la mitad.
Pero, que los blancos no sean capaces de aceptar el éxito y los logros de los negros no es una causa justa para no tener un Superman negro. Eso es sólo racismo. Superman es en parte un ideal moral -como el Capitán América, uno de sus superpoderes es tomar siempre la decisión correcta (a pesar del final de El Hombre de Acero, que es horrible)- y una fantasía de poder. Fue creado por dos niños judíos de segunda generación -de nuevo, como el Capitán- en una época en la que los judíos eran odiados. Superman es un forastero y un inmigrante, y su blancura es casi incidental en su creación. Es un medio para pasar. Para Siegel y Shuster, Kal-el era un método para existir en la sociedad sin que su herencia les retuviera y un medio para golpear la injusticia cuando la veían.
Es un privilegio cultural soñar despierto con balas que rebotan en tu pecho cuando corres poco riesgo de que te disparen
Superman es posiblemente la mayor fantasía de poder secular. No hay un equivalente negro real y comparable. Es un privilegio cultural soñar despierto con balas que rebotan en tu pecho cuando corres poco riesgo de que te disparen. Parece que hay menos iconos culturales negros que blancos, y los iconos negros que vienen a la mente suelen ser Malcolm X, Martin Luther King y Rosa Parks. Los héroes negros no han tenido la oportunidad de enfrentarse a amenazas imaginarias porque los negros se han enfrentado a muchas reales. Hace que se sienta un poco injusto que nuestra idea de un superhéroe arquetípico sea un tipo blanco.
Y, lidiar con la injusticia es todo lo que hace Superman. Los imbéciles del Comicsgate pueden llorar por mantener la política fuera de los cómics/películas/lo que sea que quieran reclamar como propiedad exclusiva, pero Superman es, en su esencia, un Guerrero de la Justicia Social. En su primera historia, se enfrenta a un casero corrupto que explota a sus inquilinos. ¿Sabes cuántos nazis golpea? Spoiler: son montones.
Nadie puede decir que Superman pertenece a los blancos, y la representación es importante. Mira el éxito de Black Panther o el remake de Los Cazafantasmas, al conectar con el público negro y femenino, respectivamente. Ver a alguien que se parece a ti en la pantalla es importante. Aparte del hecho de que da lugar a niños guapos con adorables disfraces, también les dice que pueden ser lo que quieran ser. Un Superman negro les diría a los niños negros que también pueden ser Superman.
Clark Kent es un personaje que está libre de prejuicios externos
La dificultad, sin embargo, es que el personaje de Pantera Negra es negro (una observación de nivel Pulitzer, estarás de acuerdo), y con eso quiero decir que su comportamiento, su perspectiva y la forma en que el mundo reacciona ante él están incorporados al personaje. De nuevo, no es una observación única, pero Clark Kent es el alter ego de Superman, Kent es la máscara, por así decirlo. Un Clark Kent negro sería tratado de forma muy diferente a uno blanco. Clark Kent es un personaje que está libre de prejuicios externos. ¿Sería el mismo personaje si se pusiera esa experiencia en su historia? Es ese personaje un Superman negro o un superhombre que es negro?
La alternativa es que se ignore la experiencia de los negros en Estados Unidos y se trate a Superman de forma no diferente a como se le ha tratado siempre; es un personaje de cómic, al fin y al cabo, no son precisamente incondicionales de la continuidad. Podría volar por la metrópolis como siempre lo ha hecho, aparte de un mundo que es intrínsecamente más difícil para la gente con su color de piel, y no hacer que eso afecte a sus historias o a los motivos de su personaje, en absoluto.
Un Superman negro que no aborda los problemas de la América negra sería hueco
Pero, Superman se siente un poco diferente. Él está en la cima del panteón. Es una parte de la psique americana, y quizás incluso universal. Un Superman negro que no abordara los problemas de la América negra sería hueco y la forma más delgada de representación, además de no ser fiel a la naturaleza del personaje.
El Hombre del Mañana puede utilizarse como una forma de explorar la experiencia negra, pero quizás como un contrapunto, más que como un representante. Enfrentado a sus homólogos negros, podría servir para demostrar el abismo que aún existe entre las posiciones de las distintas razas en la sociedad.
Los cómics, en su mayor parte, son liberales y progresistas. También han estado históricamente dominados por tipos blancos, lo que significa que ha habido un montón de enfoques bien intencionados, pero chapuceros, para diversificar las historias. Querían incluir personajes negros, pero no tenían ni idea de cómo pensaban, se comportaban o hablaban los negros.
En los años 70, DC publicó un número de Lois Lane en el que Lois se convierte en negra durante 24 horas, para entender mejor la experiencia de las mujeres negras. Es asombroso y más efectivo que Green Lantern y Green Arrow #76, en el que Hal Jordan es criticado por ayudar a alienígenas espaciales reales, pero sin preocuparse por los negros.
¿Qué tal una película de DC que utilice a Superman junto a otro héroe negro -Cyborg si es necesario, pero, seamos sinceros: todos queremos a John Stewart- para hablar de los problemas de los negros en América? Superman, el superhéroe más poderoso, puede ser utilizado para discutir el poder relativo de los negros frente a los blancos en Estados Unidos. Inteligente, ¿eh? Y, ya que estamos, tal vez alguien pueda abordar la cuestión de que un murciélago multimillonario golpee rutinariamente a delincuentes que estadísticamente tienen más probabilidades de provenir de entornos económicos más bajos y de ser castigados más severamente por el sistema judicial.
En última instancia, y cínicamente, parece que un Superman negro es un intento de hacer que la gente hable de una franquicia plagada de problemas. Hará que los fanáticos griten en Internet, y que todos los demás se rían de que los copos de nieve y la alt-right estén tan molestos. Dejando a un lado el cinismo, podría ser un intento de insuflar algo de vida a un personaje de 80 años de edad, y continuar el camino de la diversificación de Hollywood.
Lejos queda que un tipo blanco del norte de Inglaterra decida lo que es bueno para una institución cultural o la representación de un estrato masivo e increíblemente diverso de la humanidad. No debería estar a cargo de esa decisión.
Las personas que deberían estar a cargo son los productores, directores, actores y escritores negros
Pero, es una apuesta que requiere una mano hábil, conocimiento y experiencia. Los que deben quedar al frente son los productores, directores, actores y guionistas negros; gente que está infrarrepresentada en Hollywood. Necesitan espacio para contar las historias que quieren contar y la capacidad de encontrar respuestas a las preguntas que los blancos no pueden. ¿Cuáles son sus sentimientos sobre Superman? ¿Sobre el poder? ¿Sobre la representación? ¿Es suficiente con ser visto, o es mejor ser escuchado? ¿Puede existir uno sin el otro? Puede que Superman sea el héroe que se merecen, pero puede que no sea el héroe que necesitan.
Por Richard Worth
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