Experimentamos muchos dolores a medida que envejecemos, pero el dolor entre los omóplatos no es algo que deba ignorarse. Se puede atribuir a bastantes condiciones diferentes, pero la mayoría de las veces está causado por algo que la mayoría de nosotros hacemos mal todos los días (llegaremos a eso en un minuto).
El dolor entre los omóplatos puede variar desde un dolor agudo hasta ardor u hormigueo en la columna vertebral. A veces el dolor puede desencadenar problemas adicionales como un dolor de cabeza. Independientemente del tipo de dolor que tengas, debes asegurarte de saber qué lo está generando y cómo aliviarlo porque podría ser un signo de un problema de salud grave.
Veamos algunas de las cosas que causan el dolor entre los omóplatos y lo que puedes hacer al respecto
Toma en serio el dolor entre los omóplatos
Tienes que tomarte en serio el dolor por un par de razones. En primer lugar, el dolor entre los omóplatos a veces puede ser señal de un ataque al corazón. Es importante tener en cuenta que las mujeres a menudo experimentan diferentes síntomas de ataque al corazón que los hombres – incluyendo el dolor de espalda. Si tienes factores de riesgo de sufrir una enfermedad cardíaca, incluida la presión arterial alta, no debes ignorar el dolor. Llame a su médico, especialmente si experimenta otros síntomas de un ataque al corazón, como dolor en el pecho, dificultad para respirar o fatiga.
El dolor entre los omóplatos también puede estar causado por ciertos tipos de cáncer, enfermedades de la vesícula biliar, escoliosis, reflujo ácido, una embolia pulmonar (coágulo de sangre), artritis y traumatismos.
Dolor en el omóplato y el músculo trapecio
El dolor en el omóplato suele estar relacionado con el músculo trapecio.
Es un músculo grande y triangular que va desde la base del cuello hasta la parte baja de la espalda. El trapecio estabiliza los omóplatos y también facilita el movimiento de los hombros y el cuello.
Típicamente, si tienes un dolor que se genera desde el músculo trapecio, lo más probable es que experimentes ese dolor entre los omóplatos. Este dolor también puede tener síntomas acompañantes, tales como:
- rigidez muscular
- dolor de hombros o cuello
- espasmos musculares
- hormigueo o entumecimiento en uno o ambos brazos
- disminución de la amplitud de movimiento en los hombros o el cuello
El dolor en la parte superior de la espalda (o entre los omóplatos) que se genera a partir del músculo trapecio suele estar causado por cosas como:
- Tensiones musculares
- Exceso de uso (tal vez usted levantó algo pesado)
- Estrés
- Postura
La mala postura es la No. 1 causa de dolor en la zona entre los omóplatos.
¿Estás leyendo este artículo en una tableta, smartphone o portátil? Si es así, detente un momento y observa tu postura. ¿Está encorvado hacia delante? ¿Tiene el cuello doblado para ver la pantalla? ¿Está sentado erguido o encorvado?
Cómo aliviar el dolor leve entre los omóplatos
La buena noticia es que hay varias formas de controlar el dolor entre los omóplatos. He aquí cómo.
– Ponte a hacer yoga. No necesitas ir a clases de una hora en un estudio si puedes dominar estos tres simples movimientos. La langosta, la preparación de la plancha mirando hacia arriba y los brazos con cara de vaca están diseñados para estirar los músculos del pecho, fortalecer el cuello y estabilizar los omóplatos.
– Encuentra estiramientos que ayuden a aliviar el dolor entre los hombros. El estiramiento del abrazo y el estiramiento de la oreja al hombro se pueden hacer mientras está sentado en una silla en su oficina. Puede que incluso descubra que hace estos estiramientos de forma intuitiva a lo largo de su jornada laboral porque le sientan bien.
– Vigile su postura cuando trabaje. Encorvarse hacia delante ejerce una enorme presión sobre el cuello, lo que acaba cansando los músculos entre los omóplatos. El monitor de tu ordenador debe estar colocado de forma que no tengas que mirar hacia abajo. Los ordenadores portátiles tienen fama de provocar malas posturas. He aquí cómo solucionarlo.
– Conduce con inteligencia. La realidad es que muchos de nosotros pasamos horas al día en el coche. Así que, aunque cuides tu postura en el trabajo, podrías estar saboteando tus esfuerzos en el coche. Asegúrate de que tus rodillas están a la altura de tus caderas y que el volante está a una distancia cómoda de tu cuerpo. Tener que llegar demasiado lejos aumenta la presión sobre la espalda y el cuello.
Si los cambios anteriores no sirven para nada -o si tu dolor es intenso y va acompañado de otros síntomas- es hora de acudir al médico. Usted puede beneficiarse de la manipulación osteopática. El trabajo puede ser suficiente dolor sin tener también molestias entre los hombros durante todo el día. Póngase en contacto con nosotros hoy para programar una cita, que es el primer paso hacia el trabajo y el juego sin dolor.
Nuestra guía de actividad física también puede ayudar. Descubra lo fácil que es trabajar un poco de estiramiento y ejercicio en su día para mantenerse fuerte y saludable.