Lucrecia

El largo poema de Shakespeare, Lucrecia, tiene lugar cuando Roma se convierte en una república. Como epopeya menor (un género popular en la época de Shakespeare), se centra en figuras de importancia aparentemente secundaria: Sextus Tarquinius, el hijo del rey, y Lucrecia, la esposa de su amigo.

El poema se centra inicialmente en el deseo de Tarquino por Lucrecia, a quien viola. Después, siente una amarga decepción. Shakespeare lo expulsa entonces del poema, que se desplaza hacia Lucrecia y su sentimiento de vergüenza sexual.

Shakespeare encontró estos incidentes en la historia y el mito romanos, así como en Chaucer y en escritores ingleses contemporáneos, pero incorporó otro género, la queja, para suministrar monólogos interiores a ambos personajes. La queja de Tarquino lo presenta dividido contra sí mismo, deseando a Lucrecia pero consciente de que violarla, según él, traicionaría a su amigo y avergonzaría a Tarquino y a su familia.

En su queja, Lucrecia lucha contra la vergüenza que siente y finalmente elige el suicidio. Pocos actos han resultado tan controvertidos. En la cultura romana, el suicidio podía ser una muerte de héroe, pero el cristianismo no ha estado de acuerdo. El punto de vista de Lucrecia es que, a pesar de la castidad de su mente, ella se ha vuelto impúdica, que la mente y el cuerpo, en su lectura, no se pueden separar.