Aunque no lo creas, viajar en el tiempo es posible.

De hecho, lo estás haciendo ahora mismo. Cada segundo de cada día, estás avanzando hacia tu propio futuro. Te estás moviendo literalmente a través del tiempo, de la misma manera que te moverías a través del espacio. Puede parecer pedante, pero es un punto muy importante. El movimiento a través del tiempo sigue siendo movimiento, y estás alcanzando tu propio futuro (te guste o no).

Y lo que es aún más genial es que puedes saltar hacia adelante en el tiempo si te apetece.

Bueno, permíteme ser claro, tienes que hacer un poco de ingeniería primero.

Sabemos a través de la física de la teoría especial de la relatividad de Einstein que puedes cambiar el movimiento en el espacio por el movimiento en el tiempo. Si estás perfectamente quieto, te estás moviendo a través de la dimensión del tiempo a una velocidad determinada (la velocidad de la luz, para los curiosos). Sin embargo, en cuanto empiezas a moverte por el espacio, disminuyes tu velocidad de movimiento en el tiempo.

En otras palabras, cuanto más rápido te mueves en el espacio, más lento te mueves en el tiempo.

Esto significa que los objetos en movimiento, como un reloj en un cohete, van un poco lentos. Un segundo para alguien en una nave espacial en movimiento dura un poco más que un segundo para alguien que se queda quieto.

El truco es que para que esto tenga algún tipo de impacto notable, tienes que acercarte a la velocidad de la luz, lo que es realmente difícil de hacer -para darte una perspectiva, los astronautas que orbitan la Tierra a decenas de miles de kilómetros por hora se desvían por sólo un microsegundo más o menos de nuestros relojes en tierra.

Nuestras naves espaciales humanas más rápidas no llegan ni a una décima de la velocidad de la luz. Pero si de alguna manera pudieras pasar una buena cantidad de tiempo abrazado a ese límite máximo de velocidad en el universo, más lento irá tu reloj. Viajarás en el tiempo hacia el futuro. Nada te parecerá diferente, pero después de un par de años de viaje volverías a la Tierra para encontrar nuestros relojes adelantados en miles o incluso decenas de miles de años, dependiendo de lo rápido que vayas.

Así que el futuro es tuyo, y puedes elegir lo rápido que lo alcanzas.