Si has querido usar un tampón y no sabías por dónde empezar, o si has intentado (y fracasado) colocarte uno, has llegado al lugar adecuado. Tener problemas para usar un tampón es totalmente normal, ya sea la primera o la centésima vez que lo usas.
Seventeen charló con Alex Friedman, cofundadora de LOLA, un servicio de suscripción que ofrece tampones, compresas y otros productos corporales orgánicos, sobre sus consejos para usar tampones como principiante.
Asegúrate de estar cómoda
«El mejor momento para probar un tampón es cuando te sientas preparada», dice Friedman. Eso puede significar cuando te sientas informada y sepas más o menos lo que estás haciendo y lo que puedes esperar. Si todavía no te sientes totalmente cómoda usando un tampón, tampoco pasa nada. Como dice Friedman, no todos los tampones son iguales. Los tampones vienen en diferentes tipos y tamaños: con aplicador o sin aplicador, con aplicador de plástico o de cartón, con diferentes niveles de absorción… la lista continúa. No hay un tipo de tampón mejor o peor, así que es importante averiguar con qué te sientes más cómoda. Por ejemplo, mientras que algunas personas podrían preferir un aplicador para insertar un tampón más fácilmente, otras podrían querer usar sus manos con un no aplicador.
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Comienza con una baja absorción
Si te cuesta insertar un tampón, podría ser porque estás usando uno con una alta absorción, como un tampón súper o súper plus. Pero si eres una novata en el uso de tampones, Friedman sugiere que utilices la menor absorbencia posible. «Empieza con un tampón ligero o en el más alto, un tampón normal, y con el tiempo, sube a absorbencias más altas», dice.
Doblar con una compresa o un forro
Cuando utilices un tampón de baja absorción (como uno ligero o normal), Friedman recomienda doblar con una compresa o un forro. O, si no estás segura de que el tampón esté bien colocado y no te sientes totalmente cómoda con la idea, ten a mano una compresa o un forro como respaldo. «En gran medida se trata de probar y equivocarse», dice Friedman. «Realmente depende de ti lo que quieras usar».
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Prueba diferentes posiciones
Varía tus posiciones y mueve tu cuerpo cuando estés sentada en el inodoro, dice Friedman. «Sentarse o ponerse en cuclillas en el retrete y abrir las piernas un poco más de lo que lo harías normalmente te ayudará a la visibilidad y facilitará la inserción y extracción de un tampón»
Pero si estar sentada no te funciona, también puedes probar a ponerte de pie y colocar un pie en el asiento del retrete. ¡Cambia de posición para ver qué te funciona mejor!