¿Qué es la prolactina?

Esta hormona ayuda a regular el ciclo menstrual en las mujeres y la producción de esperma en los hombres.

La prolactina es una hormona producida por la glándula pituitaria, que se encuentra cerca de la parte inferior del cerebro.

Su producción está controlada por otras hormonas denominadas factores inhibidores de la prolactina, entre las que se encuentra la dopamina.

Tanto los hombres como las mujeres suelen tener pequeñas cantidades de prolactina en la sangre.

En los hombres, la prolactina favorece la producción de esperma.

En las mujeres, la prolactina ayuda a regular el ciclo menstrual y hace que los pechos crezcan y se desarrollen.

Cuando una mujer está embarazada, sus niveles de prolactina aumentan. Una vez que nace el bebé, los niveles elevados de prolactina provocan la producción de leche para la lactancia.

¿Qué es la hiperprolactinemia?

Si las mujeres o los hombres tienen demasiada prolactina en la sangre, pueden padecer una enfermedad denominada hiperprolactinemia.

Los niveles elevados de prolactina pueden interferir en la producción normal de hormonas, como los estrógenos y la progesterona.

Según la Sociedad Americana de Medicina Reproductiva (ASRM), un tercio de las mujeres en edad fértil con períodos menstruales irregulares pero con ovarios normales tienen hiperprolactinemia.

Las mujeres con hiperprolactinemia pueden seguir tomando píldoras anticonceptivas para evitar el embarazo o para regular su ciclo menstrual.

Mientras que algunas mujeres tienen niveles altos de prolactina sin síntomas, otras pueden experimentar:

  • Problemas para quedarse embarazadas
  • Producción de leche materna, a pesar de no estar embarazadas
  • Cambio o interrupción de la ovulación, debido a cambios en la producción de las hormonas estrógeno y progesterona
  • Falta de menstruación o menstruación irregular

En los hombres, los niveles altos de prolactina pueden causar:

  • Secreción lechosa de los pezones
  • Imposibilidad de conseguir una erección
  • Disminución del deseo sexual
  • Infertilidad
  • Baja producción o ausencia de producción de esperma

Si experimenta alguno de los síntomas anteriores, su médico puede comprobar sus niveles de prolactina solicitando un análisis de sangre.

Los niveles elevados de prolactina también pueden indicar las siguientes afecciones:

  • Traumatismo o irritación de la pared torácica, causado por cicatrices quirúrgicas, herpes zóster u otros factores
  • Enfermedad hipotalámica (un problema con el hipotálamo, una región del cerebro)
  • Hipotiroidismo (tiroides poco activa)
  • Enfermedad renal
  • Un prolactinoma, un tumor de la glándula pituitaria que produce prolactina (más comúnmente diagnosticado en mujeres menores de 50 años)
  • Otros tumores y enfermedades de la pituitaria

Aunque no se encuentra ninguna causa en aproximadamente un tercio de todos los casos de hiperprolactinemia, según la ASRM, la condición también puede ser causada por:

  • Ciertos medicamentos para tratar la depresión, la psicosis o la hipertensión
  • Herbas, como el fenogreco, las semillas de hinojo y el trébol rojo
  • Estrés excesivo o ejercicio intenso
  • Ciertos alimentos
  • Estimulación del pezón

Tratamiento de los niveles de prolactina

Hable con su médico sobre sus opciones para tratar una deficiencia de prolactina o niveles altos de prolactina.

Si su médico no puede encontrar la causa de sus niveles irregulares de prolactina, o si los niveles altos de prolactina se deben a un pequeño tumor en la glándula pituitaria y usted sigue produciendo estrógeno, es posible que no sea necesario ningún tratamiento.

En algunos casos, sin embargo, los medicamentos o la cirugía pueden ayudar a su condición, dependiendo de la causa exacta de sus niveles anormales de prolactina.

Los medicamentos más utilizados son la cabergolina y la bromocriptina, que suelen tomarse hasta que sus niveles de prolactina vuelvan a la normalidad o hasta que se quede embarazada, si ese es su objetivo.

Si tiene un tumor hipofisario de gran tamaño que está causando sus niveles elevados de prolactina y la medicación no ha mejorado sus síntomas, su médico puede recomendar la cirugía para extirpar el tumor.