El arte de hacer nudos decorativos se conoce como Macramé.
¿Recuerdas haber hecho pulseras de la amistad con hilo de algodón cuando eras pequeño? Entonces ya estabas haciendo Macramé 😉
Se hace a mano, sin agujas, entrelazando hilos o cuerdas en nudos simples o intrincados.
Macramé es una palabra francesa que significa nudo; es una de las formas de arte más antiguas.
Los antiguos persas y asirios (2300 a.C.) perfeccionaron este arte con gran habilidad. Más tarde, los árabes llevaron la forma de arte a Europa, y los europeos a las Américas, donde los caribeños lo utilizaron para hacer sus típicas hamacas de nudos.
El macramé básico tiene una serie de nudos diferentes, siendo los más conocidos el nudo cuadrado y el medio nudo, que al combinarse crean cenefas (superpuestas o tejidas) o trenzas para decorar bolsos o telas, macetas, lámparas, tapices y cortinas.
El macramé ha vuelto a ser muy popular en los últimos años, y existen más de 50 tipos de nudos diferentes.
Los únicos materiales necesarios para hacer un proyecto de macramé son el algodón pima, las uniones de madera, y una superficie a la que sujetar su proyecto (normalmente un palo o anillo de madera).
Algunos ejemplos de «nudos» de macramé incluyen: El chevrón, la trenza india, la diagonal, el zigzag, el nudo tapón, el nudo sobrepuesto, la trenza doble, la trenza simple, el nudo cuadrado, el nudo infinito, el medio nudo, etc.
Con tantos nudos y tantos nombres puede ser difícil decidir por dónde empezar, así que te recomendamos que empieces por algo sencillo, que además está de moda en decoración: los colgadores de macramé para plantas.
Hemos reunido 5 kits que puedes combinar para crear un ambiente moderno. Los kits contienen todo lo que necesitarás: Algodón Pima, cuentas de madera y anillos de madera.
