Masticar hielo es una variante de la pica, un trastorno alimentario caracterizado por anhelar y comer elementos no alimentarios tan diversos como la suciedad, el pegamento y el pelo (y cosas peores). Aunque la pica suele observarse en niños pequeños, también se da en adultos.
La compulsión específica de masticar hielo se denomina pagofagia y se ha asociado con el embarazo, la anemia por deficiencia de hierro y, a veces, otros problemas nutricionales. No sabemos por qué se produce entre las mujeres embarazadas o por qué los individuos con anemia por deficiencia de hierro ansían y mastican hielo habitualmente. Un estudio sugiere que el hielo puede aliviar el dolor de la glositis, una inflamación de la lengua que puede ser un signo de deficiencia de hierro. Las investigaciones también sugieren que el hielo tiene mejor sabor para las personas con deficiencia de hierro. Sin embargo, la pica también puede ser un síntoma de estrés, trastorno emocional, trastorno obsesivo-compulsivo y, en los niños, un trastorno del desarrollo.
No empiece a tomar suplementos de hierro con la teoría de que su problema subyacente es una deficiencia de este mineral. En su lugar, acuda a su médico para que le haga un análisis de sangre y determine si lo tiene. A excepción de las mujeres que están menstruando y de las personas que han tenido una pérdida de sangre importante, nadie debe tomar suplementos de hierro, excepto cuando se lo aconseje un médico después de que los análisis de sangre revelen una anemia por deficiencia de hierro. Un exceso de hierro no es bueno. Como es uno de los pocos minerales que no podemos eliminar, puede acumularse en el cuerpo y, al ser un fuerte agente oxidante, puede aumentar el riesgo de cáncer y dañar el corazón y las arterias. La mayoría de las personas obtienen una cantidad adecuada de hierro de su dieta: hay mucho en la carne roja, las alubias, las lentejas, el mijo, los garbanzos, las verduras de hoja verde oscura, la melaza, los albaricoques secos, los melocotones secos, las semillas de calabaza y girasol, los pistachos, las nueces, las almendras, las vieiras, las almejas, las ostras, la soja y muchos otros alimentos.
Si se entera de que no tiene deficiencia de hierro, podría considerar la terapia cognitiva conductual, que puede ayudar a superar la pica.
Andrew Weil, M.D.