¿Qué es la orquidopexia?
La orquidopexia, u orquiopexia, es un procedimiento quirúrgico que se realiza para fijar un testículo no descendido en el escroto.
¿Por qué se realiza?
Los testículos no descendidos suelen pasar al escroto cuando el bebé tiene entre 3 y 6 meses. Si los testículos no descienden en ese momento, generalmente será necesario corregirlos quirúrgicamente. Si no se realiza la orquidopexia, las posibilidades de problemas de fertilidad o de cáncer testicular aumentan más adelante.
¿En qué consiste?
En los casos en que el testículo se puede palpar en la ingle, se realiza una orquidopexia simple. En primer lugar, se realiza un corte en la ingle para localizar el testículo. A continuación, se realiza una segunda incisión, que recoloca el testículo, desplazándolo hacia el escroto.
En los casos en los que el testículo está situado más arriba en el abdomen, se puede realizar una laparoscopia. La laparoscopia es un tipo de cirugía mínimamente invasiva en la que se utiliza un tubo largo con una luz y una cámara conectadas para realizar el procedimiento. Ambos tipos de cirugía se realizan con anestesia general.
Cuidados postoperatorios
Después de la cirugía, es normal que su hijo se sienta mal durante un día aproximadamente, mientras se le pasa el efecto de la anestesia. Puede mantenerlo distraído durante este tiempo para ayudarle a sentirse mejor, realizando actividades como leer juntos.
Asegúrese de que su hijo bebe mucho líquido y descansa en casa durante un par de días o más después de la intervención. No debería volver al colegio o a la guardería hasta pasados unos dos días. Su hijo puede estar más cómodo si lleva ropa más holgada, ya que es normal que la zona de la ingle esté dolorida y sensible después de la operación. Asegúrese también de que no monte en bicicleta ni utilice ningún tipo de juguete similar en las semanas siguientes a la intervención, ya que esto puede provocar que los testículos vuelvan a subir al abdomen.