Odontología pediátrica

La odontología pediátrica es una de las diez especialidades dentales reconocidas por la American Dental Association. Otras especialidades son la salud pública dental, la endodoncia, la patología oral y maxilofacial, la radiología oral y maxilofacial, la cirugía oral y maxilofacial, la ortodoncia y la ortopedia dentofacial, la periodoncia y la prostodoncia.

El primer paso sería obtener un título universitario en ciencias biomédicas, ciencias de la salud o ciencias sociales. Mientras se está en la universidad, se puede explorar la profesión haciendo prácticas en un consultorio dental pediátrico o en un hospital infantil, o trabajando en la investigación académica que estudia la salud oral de los niños.

El segundo paso sería asistir a una escuela de odontología durante 4 años de educación y formación. Uno puede graduarse como Doctor en Cirugía Dental (DDS) o Doctor en Medicina Dental (DMD). Ambos títulos son equivalentes e implican la misma formación. Sólo depende de la escuela específica a la que se acuda. Durante los dos primeros años de la facultad de odontología, los estudiantes reciben clases didácticas sobre ciencias biomédicas y aprenden habilidades manuales (procedimientos dentales) en un entorno de laboratorio preclínico. El tercer y cuarto año de la facultad de odontología se centran en la atención clínica bajo la supervisión de un docente autorizado. Antes de graduarse, todos los estudiantes de odontología deben aprobar la parte I y la parte II del Examen Nacional de Odontología (National Board Dental Examination), así como los exámenes de habilidades clínicas (por ejemplo, ADEX, WREB, etc.) para obtener la licencia de odontólogo general.

Para especializarse en odontología pediátrica, se puede buscar formación adicional en un programa de residencia de posgrado acreditado. El programa de residencia en odontología pediátrica puede tener una duración de 24 meses o más. Al final, los dentistas residentes obtienen un certificado en odontología pediátrica con o sin título de maestría, dependiendo del programa al que asistan. La formación especializada abarca todos los aspectos del cuidado de la salud bucodental desde la infancia hasta la adolescencia, incluyendo la gestión del comportamiento, la odontología preventiva, la odontología restauradora, la odontología de sedación, el tratamiento de los traumatismos orales, la ortodoncia interceptiva, la medicina oral y la patología. Una gran parte de la formación de la residencia se dedica a tratar a pacientes pediátricos en una clínica dental o en el quirófano de un hospital.

Tras completar con éxito la formación de postgrado, uno se convierte en elegible para el examen de la Junta Americana de Odontología Pediátrica (ABPD). La primera parte del examen de la Junta es un examen escrito. Una vez superado el examen escrito, se pasa a la segunda parte, que es un examen oral en el que se evalúan los conocimientos y las habilidades clínicas. Si se completa con éxito la certificación del consejo, se obtiene el estatus de Diplomado en el Consejo Americano de Odontología Pediátrica que permite ejercer como dentista pediátrico certificado por el consejo.