Es la bebida espirituosa original de Estados Unidos y, gracias a las manzanas autóctonas que se cultivan en todas las partes del país, está volviendo con fuerza. Entonces, ¿por qué no lo bebes?

Dejemos algo claro: El brandy de manzana no es la cosa verde y dulce que se usaba en los martinis de manzana en los años 90. (El brandy de manzana es un licor fuerte destilado de manzanas. Se embotella a una graduación de 80 grados o más, y se fabricaba en Estados Unidos antes de que existieran los Estados Unidos. (En Francia lo llaman Calvados.) Abraham Lincoln lo servía en su taberna. George Washington lo hacía él mismo. Se cuenta que William Faulkner lo mezcló con agua caliente y limón, le prendió fuego y llamó al resultado Jersey Lighthouse.

¿Así que sabe a manzanas? No en el sentido de Jolly Rancher, pero, sí, evoca un huerto: los taninos correosos de la piel de la manzana, el crujido de las hojas bajo los pies. Si se le añaden los sabores a especias de las barricas de whisky de roble, se obtiene una bebida espirituosa de primera clase. Dado que apenas hay un lugar en este país donde no crezcan las manzanas, las pequeñas destilerías están devolviendo esta bebida alcohólica a la corriente principal, desde las Cascadas hasta las Montañas Blancas. Bébalo como si fuera whisky: solo, con hielo o en un cóctel sencillo como el Marconi Wireless. Se puede encontrar brandy de manzana todo el año, pero tiene algo de otoñal. En otras palabras, es mejor beberlo ahora.

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