Como disciplina de gran alcance con innumerables aplicaciones, las matemáticas son inherentemente prácticas. Aunque no faltan las matemáticas en la vida cotidiana, un área que domina nuestra existencia diaria es la geometría. Al fin y al cabo, cada día nos encontramos con una amplia gama de formas geométricas, como viajar en metros cilíndricos o autobuses rectangulares, cruzar ríos por puentes arqueados, y trabajar y vivir en edificios rectangulares.
Y para los profesores, escasos de tiempo y presionados por ideas de lecciones reflexivas y atractivas, la geometría en la arquitectura es un gran tema. Después de todo, las formas en el diseño estructural son omnipresentes (pero se pasan por alto fácilmente porque son muy comunes), y lo mejor de todo, son prácticas. Hay innumerables proyectos prácticos que puedes hacer con este tema.
Veamos tres formas clave, sus puntos fuertes y cómo se utilizan en la arquitectura actual.
Los triángulos poseen una serie de ventajas clave que los hacen ideales tanto para los arquitectos como para los estudiantes curiosos: estas formas son increíblemente comunes, estructuralmente sólidas y fáciles de aplicar y utilizar en la vida cotidiana.