La sobredosis es una consecuencia peligrosa y mortal del consumo de heroína. Una gran dosis de heroína deprime el ritmo cardíaco y la respiración hasta tal punto que el consumidor no puede sobrevivir sin ayuda médica. La naloxona (por ejemplo, Narcan®) es un medicamento antagonista de los receptores de opioides que puede eliminar todos los signos de intoxicación por opioides para revertir una sobredosis de opioides. Actúa uniéndose rápidamente a los receptores de opioides, impidiendo que la heroína los active.27 Debido al enorme aumento de las muertes por sobredosis debidas al uso indebido de opioides con receta, ha aumentado la demanda de servicios de prevención de sobredosis de opioides. Se ha demostrado que la naloxona que puede utilizar el personal no médico es rentable y salva vidas.28 En abril de 2014, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó un autoinyector manual de naloxona llamado Evzio®, que administra rápidamente una dosis única de naloxona en el músculo o bajo la piel, ganando tiempo hasta que pueda llegar la asistencia médica. En 2015, la FDA aprobó un spray nasal Narcan® que se pulveriza directamente en una fosa nasal. Dado que Evzio® y Narcan® pueden ser utilizados por familiares o cuidadores, se amplía en gran medida el acceso a la naloxona.29
Además, la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias (SAMHSA) actualiza continuamente su kit de herramientas para la prevención de sobredosis de opiáceos, que proporciona información útil necesaria para desarrollar políticas y prácticas para prevenir las sobredosis y las muertes relacionadas con los opiáceos. El kit ofrece material adaptado a los primeros intervinientes, a los proveedores de tratamiento y a las personas que se recuperan de una sobredosis de opiáceos. Aprenda más sobre la naloxona en el informe de política del NIDA.