La harina de repostería puede suponer la diferencia entre unas deliciosas capas ligeras y escamosas y una repostería más pesada y densa que puede resultar dura. El problema es que las harinas especiales pueden ser difíciles de encontrar, y bastante caras. Por suerte, puedes hacer tu propia harina de repostería con un par de ingredientes sencillos y económicos.

Diferencia entre tipos de harina

En primer lugar, seguro que te preguntas cuál es la diferencia entre las distintas harinas. La respuesta, amigo mío, es la cantidad de proteínas. Para ponerlo en perspectiva, esta es la cantidad aproximada de proteínas de cada harina:

Harina de pan: 14 – 16%
Harina de uso general (AP): 10 – 12%
Harina de repostería: 9%
Harina de pastelería: 7-8%

Por supuesto, estas cantidades varían según la marca, así como según la región o el país. La harina de repostería sólo tiene un nueve por ciento de contenido en proteínas. El menor contenido de proteínas garantiza que los productos horneados tendrán una masa más ligera y escamosa. Es perfecta para bollos, galletas, cortezas de tartas o pasteles e incluso panes rápidos.

El contenido de proteínas en la harina está directamente relacionado con la cantidad de gluten que se forma, lo que afecta a la textura y estructura del producto final. Las harinas que contienen menores cantidades de proteínas tienen menos gluten, mientras que las harinas con más proteínas tienen más gluten, como las de los panes de levadura.

Si quieres hacer la masa perfecta aquí tienes la proporción para hacer tu propia harina de repostería:

Receta de harina de repostería casera

Para 1 taza de harina de repostería necesitarás:
3/8 de taza de harina multiuso (6 cucharadas)
5/8 de taza de harina de pastelería (10 cucharadas)

Para 4 tazas de harina
1 1/2 tazas de harina multiuso
2 1/2 tazas de harina de pastelería

¿Qué pasa si no tienes harina de pastelería? Puedes coger 1 taza de harina de uso general, retirar 1 cucharada de la harina y añadir 1 cucharada de maicena. Esta mezcla dará como resultado una harina un poco más dura.

Una de nuestras recetas favoritas que requieren harina de repostería es el hojaldre casero.

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