Si va a someterse a un procedimiento dental pronto, es posible que oiga hablar del gas de la risa (también conocido como óxido nitroso). El gas de la risa es un anestésico común, administrado como un gas incoloro, no inflamable y de olor dulce. Aunque el sedante no le hará dormir, hará que el procedimiento sea más cómodo para usted. Para asegurarse de que está preparado para la intervención, consulte estos cinco datos interesantes sobre el gas hilarante que todos los pacientes deberían conocer.
El óxido nitroso existe desde hace décadas.
El óxido nitroso fue descubierto por primera vez por un científico inglés llamado Joseph Priestly en 1793, aunque no se reconoció su potencial médico hasta 1844. En la década de 1960, se convirtió en un pilar de la anestesia dental y, desde entonces, se ha utilizado comúnmente.
El gas nitroso es completamente seguro cuando lo administra un profesional.
Hay una razón por la que el óxido nitroso ha sido un anestésico popular durante tanto tiempo. La inhalación del gas es perfectamente segura y no tiene ningún impacto en el cerebro, los pulmones, los riñones, el corazón o el hígado. El gas sí provoca efectos desorientadores, por lo que es posible tropezar y caerse si se levanta demasiado rápido (aunque sus efectos sólo duran unos minutos después de quitarse la máscara).
El gas nitroso se administra fácilmente.
Si tiene miedo a las agujas, ¡está de suerte! El óxido nitroso no requiere una inyección para su administración. En su lugar, el gas hilarante se difunde a través de una máscara, donde el anestésico se absorbe a través de los pulmones. Simplemente respirando con normalidad a través de la máscara, los efectos sedantes aparecen en pocos minutos. A continuación, el dentista puede ajustar fácilmente la profundidad de la sedación si es demasiado o demasiado poco, pero en cualquier caso no se le dormirá por completo. Una vez finalizado el procedimiento, el dentista sólo tiene que retirar la máscara para que desaparezca el efecto de la anestesia.
Los dentistas utilizan el gas hilarante por varias razones.
El óxido nitroso puede ser ventajoso en muchas circunstancias. Para empezar, este anestésico es estupendo para usarlo con pacientes pediátricos, ya que les permite relajarse y cooperar más fácilmente. Del mismo modo, funciona bien para los pacientes con discapacidades mentales o físicas, o para aquellos con una menor tolerancia al dolor, ya que puede reducir el dolor y el estrés de ciertos procedimientos dentales.
Puede esperar una ligera sensación de hormigueo, ¡pero sin efectos de resaca!
Después de unos 2-3 minutos, puede esperar que el óxido nitroso haga pleno efecto. Sentirá una ligera sensación de hormigueo y adormecimiento general en todo el cuerpo. El gas de la risa le pone esencialmente en un estado de sueño, pero todavía será capaz de responder a las preguntas y comunicarse con su dentista si es necesario. Una vez completado el procedimiento, el gas sale de su cuerpo mientras usted respira (completando el proceso en unos 3-5 minutos). No hay efectos de resaca a esta anestesia, por lo que será capaz de conducir a casa después del procedimiento!
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