Depresión posparto vs. tristeza del bebé: La verdadera diferencia

¿Qué es la depresión posparto?

La depresión posparto (PPD) es la complicación médica más común del parto.

Esta forma muy real de depresión se ha minimizado a menudo como la «tristeza del bebé». Pero hay una diferencia entre la depresión posparto y sentir los resultados de los desequilibrios hormonales que pueden causar tristeza.

¿Cuáles son las causas de la depresión posparto?

Es muy difícil decir qué causa la depresión posparto. Incluso la Clínica Mayo dice que «es simplemente una complicación del parto».

Tener un bebé puede afectar a una serie de cosas en la vida de algunas nuevas madres, incluyendo su cuerpo y su capacidad para dormir lo suficiente (esto último puede ser un gran contribuyente a la depresión). Además, tras el parto se produce un descenso drástico de las hormonas, incluidos los estrógenos, la progesterona y otras hormonas producidas por la glándula tiroides. Este descenso hormonal puede contribuir a la depresión postparto al provocar sentimientos de agotamiento, pereza y depresión.

Aunque sentirse triste, de mal humor o cansada es normal en las primeras semanas después del parto, la depresión postparto es diferente. Los síntomas comunes de la depresión posparto incluyen «irritabilidad e ira intensas, miedo a no ser una buena madre, desesperanza». Sin embargo, si no se realiza un examen adecuado, hasta la mitad de los casos de depresión posparto pueden quedar sin diagnosticar.

Además, una nueva madre puede ser reacia a hablar de cómo se siente por miedo a ser juzgada o a ser considerada una madre inadecuada.

La depresión posparto no sólo afecta a las nuevas madres

La depresión posparto no es sólo para las madres. Los padres pueden experimentar muchos de los mismos síntomas por algunas de las mismas razones (la falta de sueño, por ejemplo.) Algunos se han referido a ella como «Papás tristes», y un estudio muestra que el problema es mucho más frecuente de lo que se pensaba.

Parents.com señala la falta de sueño como «probablemente el mayor culpable cuando se trata de la depresión entre los nuevos padres». Otros son los antecedentes de depresión, los problemas económicos y un «bebé enfermo, con cólicos o prematuro».

«Cualquier padre que se enfrente a los trastornos emocionales y sociales que provoca un bebé corre el riesgo de sufrir depresión», dice la doctora Sara Rosenquist, terapeuta en Chapel Hill, Carolina del Norte.

Añade que los padres adoptivos son vulnerables.

Psicosis posparto: Una enfermedad más grave y potencialmente peligrosa

Hay una forma aún más grave de PPD conocida como psicosis posparto. La Action on Postpartum Psychosis Network (Red de Acción sobre la Psicosis Posparto) escribe que hay algunas mujeres (como las que tienen antecedentes de trastorno bipolar) que tienen un riesgo mucho mayor.

Los síntomas de la psicosis posparto son considerablemente más dramáticos que los de la depresión posparto. La Red de Psicosis Postparto escribe que estos pueden incluir:

  • «Creencias extrañas que no podrían ser ciertas (delirios)
  • Oír, ver, sentir, u oliendo cosas que no existen (alucinaciones)
  • Estado de ánimo elevado con pérdida de contacto con la realidad (manía)
  • Confusión grave
  • Sentir que las cosas están conectadas de manera especial o que las historias en la televisión o la radio tienen un significado personal especial
  • Sentir que el bebé está conectado con Dios o el Diablo de alguna manera»

La enfermedad puede empeorar muy rápidamente y debe tratarse siempre como una emergencia médica. La mayoría de las mujeres son tratadas con medicamentos y, en algunos casos, pueden ser ingresadas en el hospital.

La depresión posparto es real

La Clínica Mayo insta a las pacientes a ponerse en contacto con su médico cuando los síntomas:

  • «No desaparezcan después de dos semanas
  • Empeoren
  • Le dificulten el cuidado de su bebé
  • Dificulten la realización de las tareas cotidianas»

Si experimenta alguno de estos síntomas, las mamás y los papás deben programar una cita con un médico o un profesional de la salud mental lo antes posible.

Además, si estos síntomas se convierten en pensamientos de suicidio o de daño al bebé, debe llamar a la Línea Nacional de Prevención del Suicidio (National Suicide Prevention Lifeline) al 1-800-273-TALK (1-800-273-8255) o utilizar su webchat en suicidepreventionlifeline.org/chat.

La Clínica Mayo recuerda que «cualquier nueva mamá puede experimentar depresión posparto y puede desarrollarse después del nacimiento de cualquier hijo, no sólo del primero». Sin embargo, corres un mayor riesgo si tienes un historial de depresión u otros problemas de salud mental, y si no se trata, la DPP puede obstaculizar el vínculo crítico entre la madre y el bebé.

El paso más importante es ser abierta sobre tu historial de salud mental durante el embarazo, controlando y compartiendo cualquier síntoma de depresión antes y después del parto.

Si estás embarazada y luchas contra la depresión, habla con tu médico.