A veces puedes ver una luz parpadeante inesperada en uno o ambos ojos, sin una fuente externa que la acompañe, como una luz brillante. Si experimenta esto, debe saber que los destellos (así como las moscas volantes, otro síntoma común) son en realidad bastante comunes y pueden no requerir ningún tratamiento médico urgente.
Los destellos pueden ocurrir solos o con moscas volantes. Parecen luces o rayos y suelen ser más perceptibles por la noche o en entornos oscuros. Suelen estar causados por un «tirón» del gel vítreo en la parte posterior del ojo. Puede tratarse de algo inofensivo, pero debe acudir a su optometrista para que le haga una revisión y descarte algo más grave.
Si ve los destellos de forma repentina y en mayor cantidad de lo habitual, sin duda debe acudir a su optometrista o médico inmediatamente. Un aumento repentino e inexplicable de este tipo de destellos puede indicar que el líquido vítreo del interior de su ojo se está separando de la retina, la capa sensible a la luz situada en la parte posterior del ojo.
Esto aumenta el riesgo de que la propia retina se desprenda o se separe de la sección interna del ojo, lo que significa que su visión se verá afectada. En este caso, es fundamental buscar ayuda de inmediato, ya que cuanto antes se detecte el desgarro de la retina, mayores serán las posibilidades de que se vuelva a unir con éxito.
En otras ocasiones, ver un destello de luz también puede ser algo habitual tras recibir una lesión importante en la zona de la cabeza, lo que también se conoce como «ver estrellas». En cambio, si los destellos parecen más bien líneas irregulares u ondas de calor y duran entre 10 y 20 minutos, la causa suele atribuirse a las migrañas. Si le preocupa ver destellos en un ojo, lo mejor es que consulte a su optometrista para obtener más información.