Un cocodrilo asesino de 680 kg ha sido capturado tres meses después de comerse a un adolescente en Indonesia.
La bestia se abalanzó sobre Mahmoud, de 17 años, mientras pescaba en las islas Bangka Belitung el 23 de julio.
Los lugareños recuperaron el cuerpo del chico, que estaba cubierto de marcas de mordeduras y al que le faltaban dos extremidades. Sin embargo, el mortífero cocodrilo de agua salada escapó.
Los lugareños, aterrorizados, tuvieron que huir del monstruo al menos dos veces cuando intentó atacar sus embarcaciones a pesar de que pusieron trampas con carne y lazos.
Sin embargo, el cocodrilo de cinco metros de largo fue finalmente capturado el 27 de octubre tras morder el cebo de las trampas.
Las imágenes muestran a varios hombres luchando por sacar al enorme cocodrilo de la apertura de un estuario y llevarlo de vuelta a la orilla.
Los lugareños dijeron que el cocodrilo fue capturado utilizando una larga caña de pescar y un señuelo para patos. Los hombres del pueblo ataron rápidamente al reptil mientras estaba ocupado tirando del cebo.
Luego sujetaron las patas del animal y ataron su cuerpo a una larga vara de bambú mientras lo arrastraban por las orillas del río.
Los lugareños dijeron que el cocodrilo, identificado por las manchas blancas de su espalda, era responsable de múltiples ataques a los habitantes de la isla.
Desfilaron a la bestia por el pueblo esa misma tarde y la dejaron toda la noche. El cocodrilo fue encontrado muerto a la mañana siguiente.
El jefe de la policía del sector de Sungaiselan, el inspector Jean Sinulingga, dijo que el cocodrilo debía ser entregado al centro de vida silvestre.
«Investigaremos cómo murió y enviaremos su cuerpo al centro de vida silvestre para que puedan manejarlo adecuadamente mientras tanto», dijo.
Australscope
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