El Observatorio Griffith es un lugar educativo que cuenta con telescopios, exposiciones científicas, un planetario y vistas impresionantes de lugares emblemáticos de Los Ángeles, como el letrero de Hollywood. Hay muchas maneras de llegar al Observatorio Griffith. Una de las rutas más populares es el Sendero del Observatorio Este, un camino de fuego que suele estar repleto de gente, algunos con un destino en mente y otros que salen a correr o a pasear a sus perros. El sendero comienza en Vista Del Valle Drive y termina en el observatorio, serpenteando gradualmente cuesta arriba. A medida que se camina, el icónico edificio aparecerá por detrás de la línea de árboles. Hollywood, Los Ángeles y las montañas de San Gabriel proporcionan un impresionante telón de fondo para esta caminata.

En 1896 Griffith J. Griffith donó miles de acres de tierra a la ciudad de Los Ángeles con el fin de desarrollar el Parque Griffith. Cuando murió casi 25 años después, dejó en su testamento fondos e instrucciones para la construcción del Observatorio Griffith. Se inauguró en 1935 y no se cobró la entrada a los visitantes. A día de hoy, la entrada al edificio y muchos de los programas y eventos del observatorio son gratuitos para el público. En 2002 se cerró el observatorio por primera vez desde su apertura. El edificio fue restaurado durante los cuatro años siguientes, un proyecto que costó 93 millones de dólares.

En el Horizonte de Sucesos Leonard Nimoy del Observatorio Griffith, llamado así por el hombre que interpretó a Spock en Star Trek: La serie original, se llevan a cabo diversos programas centrados en el espacio. Las familias y los grupos escolares son los visitantes más habituales, pero cualquiera que se interese por el espacio exterior disfrutará en el observatorio.

El Parque Griffith se extiende por 4.107 acres de terreno y es el hogar de muchas criaturas diferentes. En 2008 se publicó un artículo en la Academia de Ciencias del Sur de California en el que se enumeraban zarigüeyas, zorros grises, linces, mapaches, mofetas rayadas y coyotes entre los residentes carnívoros del parque. Es poco probable que los excursionistas se encuentren con estos mamíferos en el sendero del Observatorio Este, ya que la abundancia de personas y perros los ahuyenta, pero tenga por seguro que el parque está repleto de fauna.