Anya aparece por primera vez en la película Anastasia como una niña en un orfanato que tiene vagos recuerdos sobre la vida antes de llegar. Se lanza a la búsqueda de su pasado. En San Petersburgo conoce a los estafadores Dimitri y Vladimir, que intentan disfrazarla para convertirla en la princesa Anastasia, ya que su abuela María Feodorovna (la emperatriz María) ofrece una recompensa a quien la reúna con su nieta (que se perdió tras el asalto al palacio y la muerte de la familia real). Sin embargo, Dimitri y Vladimir ignoran que Anya es realmente Anastasia. Por desgracia, el malvado Rasputín conoce la verdad sobre Anya e intenta matarla. Sin embargo, al final fracasa. Anya se reúne con su abuela casi al final de la película, y se le ofrece la oportunidad de ser una princesa. Anya se fuga con Dimitri y deja una nota a su abuela en la que le promete que volverá después de la luna de miel.
Anya tiene una complexión delgada y una piel ligeramente bronceada, junto con una larga melena castaña y ojos azules. A diferencia de la mayoría de las heroínas animadas, lleva muchos trajes a lo largo de la película. Comienza la película vestida con una túnica amarilla raída y medias negras bajo un abrigo verde. Sin embargo, cuando se dirige a París, lleva un vestido azul de manga corta que le regala Dimitri. Después de mostrar una serie de trajes inspirados en las flappers, Anya lleva un vestido de noche azul marino sin tirantes con el pelo recogido. Al final, cuando ya se sabe que Anya es la princesa Anastasia, lleva un elaborado vestido de corte dorado, con un brillante kokoshnik de diamantes.