Alcance del problema

En 2016, se estima que 320 000 personas murieron ahogadas, lo que hace que el ahogamiento sea un importante problema de salud pública en todo el mundo. En 2015, las lesiones representaron más del 9% del total de la mortalidad mundial. El ahogamiento es la tercera causa principal de muerte por lesiones no intencionales, y representa el 7% de todas las muertes relacionadas con lesiones.

Sin embargo, la carga global y la muerte por ahogamiento se encuentran en todas las economías y regiones:

• Los países de ingresos bajos y medios registran más del 90% de las muertes por ahogamiento involuntario;
• más de la mitad de los ahogamientos del mundo se producen en la Región del Pacífico Occidental de la OMS y en la Región de Asia Sudoriental de la OMS;
• las tasas de mortalidad por ahogamiento son más elevadas en la Región de África de la OMS, y son entre 15 y 20 veces superiores a las observadas en Alemania o el Reino Unido, respectivamente.

A pesar de que los datos son limitados, varios estudios revelan información sobre el impacto del coste de los ahogamientos. En los Estados Unidos de América, el 45% de las muertes por ahogamiento se producen en el segmento de población más activo económicamente. Sólo en Estados Unidos, los ahogamientos en la costa suponen 273 millones de dólares al año en costes directos e indirectos. En Australia y Canadá, el coste total anual de las lesiones por ahogamiento es de 85,5 y 173 millones de dólares respectivamente.

Hay un amplio rango de incertidumbre en torno a la estimación de las muertes por ahogamiento a nivel mundial. Los métodos de categorización de datos oficiales para ahogamientos excluyen las muertes por ahogamiento intencionadas (suicidio u homicidio) y las muertes por ahogamiento causadas por desastres de inundaciones e incidentes de transporte acuático.

Los datos de los países de ingresos altos sugieren que estos métodos de categorización dan lugar a una subrepresentación significativa del número total de ahogados de hasta el 50% en algunos países de ingresos altos. Las estadísticas de ahogamientos no mortales en muchos países no están disponibles o no son fiables.

Factores de riesgo

Edad

El Informe mundial sobre ahogamientos (2014) muestra que la edad es uno de los principales factores de riesgo de ahogamiento. Esta relación se asocia a menudo con una falta de supervisión. A nivel mundial, las tasas más altas de ahogamiento se dan entre los niños de 1 a 4 años, seguidos por los de 5 a 9 años. En la Región del Pacífico Occidental de la OMS, los niños de 5 a 14 años mueren más frecuentemente por ahogamiento que por cualquier otra causa.

• Informe mundial sobre ahogamientos (2014)

Las estadísticas sobre ahogamientos de niños de varios países presentadas en el Informe mundial sobre ahogamientos son especialmente reveladoras:

• El ahogamiento es una de las 5 principales causas de muerte de personas de 1 a 14 años para 48 de los 85 países con datos que cumplen los criterios de inclusión (1).
• Australia: el ahogamiento es la principal causa de muerte por lesiones no intencionadas en niños de 1 a 3 años.
• Bangladesh: el ahogamiento representa el 43% de todas las muertes en niños de 1 a 4 años.
• China: el ahogamiento es la principal causa de muerte por lesiones en niños de 1 a 14 años.
• Estados Unidos de América: el ahogamiento es la segunda causa principal de muerte por lesiones no intencionadas en niños de 1 a 14 años.

Género

Los varones están especialmente expuestos al riesgo de ahogamiento, con una tasa de mortalidad global dos veces superior a la de las mujeres. Tienen más probabilidades de ser hospitalizados que las mujeres por ahogamientos no mortales. Los estudios sugieren que las mayores tasas de ahogamiento entre los varones se deben a una mayor exposición al agua y a un comportamiento más arriesgado, como nadar solo, beber alcohol antes de nadar solo y navegar.

Acceso al agua

El mayor acceso al agua es otro factor de riesgo de ahogamiento. Las personas con ocupaciones como la pesca comercial o la pesca de subsistencia, que utilizan pequeñas embarcaciones en países de bajos ingresos, son más propensas a ahogarse. Los niños que viven cerca de fuentes de agua abiertas, como zanjas, estanques, canales de riego o piscinas, corren un riesgo especial.

Catástrofes por inundación

El ahogamiento representa el 75% de las muertes en desastres por inundación. Las catástrofes por inundación son cada vez más frecuentes y se prevé que esta tendencia continúe. Los riesgos de ahogamiento aumentan con las inundaciones, sobre todo en los países de ingresos bajos y medios, donde la población vive en zonas propensas a las inundaciones y la capacidad para alertar, evacuar o proteger a las comunidades de las inundaciones es escasa o apenas se está desarrollando.

Transporte por agua

Los desplazamientos diarios y los viajes de los inmigrantes o solicitantes de asilo suelen realizarse en embarcaciones abarrotadas e inseguras que carecen de equipos de seguridad o que son manejadas por personal no capacitado para hacer frente a incidentes de transporte o a la navegación. El personal bajo la influencia del alcohol o las drogas también es un riesgo.

Otros factores de riesgo

Hay otros factores que se asocian a un mayor riesgo de ahogamiento, como:

• un estatus socioeconómico más bajo, ser miembro de una minoría étnica, la falta de educación superior y las poblaciones rurales, todos ellos tienden a estar asociados, aunque esta asociación puede variar entre países;
• los bebés que se dejan sin supervisión o solos con otro niño cerca del agua;
• el consumo de alcohol, cerca o dentro del agua;
• condiciones médicas, como la epilepsia;
• turistas que no están familiarizados con los riesgos y las características locales del agua;

Prevención

Hay muchas acciones para prevenir los ahogamientos. La instalación de barreras (por ejemplo, cubriendo los pozos, utilizando barreras en las puertas y corrales, vallando las piscinas, etc.) para controlar el acceso a los peligros del agua, o la eliminación de los peligros del agua por completo, reduce en gran medida la exposición a los peligros del agua y el riesgo.

Las guarderías comunitarias y supervisadas para niños en edad preescolar pueden reducir el riesgo de ahogamiento y tienen otros beneficios probados para la salud. Enseñar a los niños en edad escolar conocimientos básicos de natación, seguridad en el agua y rescate seguro es otro enfoque. Pero estos esfuerzos deben llevarse a cabo haciendo hincapié en la seguridad y en una gestión global de los riesgos que incluya un plan de estudios de seguridad probada, un área de formación segura, la selección de los alumnos y las proporciones de alumnos-instructores establecidas para la seguridad.

Las políticas y la legislación eficaces también son importantes para la prevención de los ahogamientos. El establecimiento y la aplicación de normas de seguridad para la navegación, el transporte marítimo y los transbordadores es una parte importante de la mejora de la seguridad en el agua y la prevención de los ahogamientos. El aumento de la resistencia a las inundaciones y la gestión de los riesgos de inundación a través de una mejor planificación de la preparación para las catástrofes, la planificación del uso del suelo y los sistemas de alerta temprana pueden prevenir los ahogamientos durante las catástrofes por inundación.

El desarrollo de una estrategia nacional de seguridad en el agua puede sensibilizar sobre la seguridad en torno al agua, crear consenso en torno a las soluciones, proporcionar una dirección estratégica y un marco para guiar la acción multisectorial y permitir el seguimiento y la evaluación de los esfuerzos.

Respuesta de la OMS

La OMS publicó el Informe mundial sobre ahogamientos en noviembre de 2014. Era la primera vez que la OMS elaboraba un informe dedicado exclusivamente a los ahogamientos. En el informe se señalaba que, hasta la fecha, los ahogamientos se han pasado por alto en gran medida, y que los gobiernos y las comunidades de investigación y políticas deberían hacer mucho más para dar prioridad a la prevención de los ahogamientos y a su integración con otros programas de salud pública.

El informe mundial sobre ahogamientos ofrece recomendaciones a los gobiernos para que adapten y apliquen programas eficaces de prevención de ahogamientos a sus entornos, mejoren los datos sobre ahogamientos y elaboren planes nacionales de seguridad en el agua. En el informe también se señala el carácter multisectorial de los ahogamientos y se pide una mayor coordinación y colaboración entre los organismos de las Naciones Unidas, los gobiernos, las principales ONG y las instituciones académicas para prevenirlos.

En mayo de 2017, la OMS publicó Preventing drowning: an implementation guide. Esta publicación se basa en el Informe mundial sobre ahogamientos y proporciona orientaciones concretas a los profesionales de la prevención de ahogamientos sobre la forma de llevar a cabo intervenciones de prevención de ahogamientos.

• Prevenir los ahogamientos: una guía de aplicación

En el ámbito nacional, la OMS ha colaborado con los Ministerios de Salud de algunos países de ingresos bajos y medianos para prevenir los ahogamientos mediante el uso de barreras que controlan el acceso al agua y el establecimiento de guarderías para niños en edad preescolar. Además, la OMS también ha financiado investigaciones en países de ingresos bajos que exploran cuestiones prioritarias relacionadas con la prevención de los ahogamientos. A nivel regional, la OMS organiza programas de formación y convoca talleres para reunir a representantes de gobiernos, ONG y organismos de las Naciones Unidas que trabajan en la prevención de ahogamientos.

(1) Se consideraron los datos de mortalidad de los países que cumplían los siguientes criterios: cobertura estimada de las muertes nacionales del 70% o más; causas de muerte mal definidas inferiores al 20%; 10 o más muertes en el grupo de edad de 1 a 14 años; y datos disponibles a partir de 2007.