Los sentimientos sinceros y las intenciones sinceras llegan al corazón de todos. Es importante entender qué es lo que define la sinceridad y cómo lograrla? No hay mejor fórmula para la sinceridad que ser sincero teniendo una fe en ti mismo y siendo genuino.
No finjas ser sincero, no tiene sentido. Si has decidido convertirte en una persona sincera, aquí tienes algunas maneras de hacerlo.
Realiza que la sinceridad viene del corazón
Cualquier cosa que digas o hagas, es realmente importante tener la intención de decirlo o hacerlo. No puedes ser sincero si dices que amas el chocolate cuando en realidad lo odias.
No puedes ser sincero si alabas a alguien pero en el fondo lo odias. No puedes ser sincero cuando inventas excusas con el propósito de una futura venganza. Sin embargo, puedes ser sincero si eres fiel a ti mismo.
Sé genuino
Actuar de la misma manera a solas que si lo haces en presencia de otras personas es otra forma de convertirse en una persona sincera. Si te esfuerzas por ser lo que crees que los demás quieren ver en ti, será poco sincero y pasarás mucho tiempo proyectándote como una persona que no es una parte real de ti. Sólo será un trabajo duro, pero el resultado no será sincero.
Haz el bien sin recompensa
Cuando hagas algo bueno, no esperes una recompensa. Dar es un acto de expresión de tu genuina preocupación por los demás, una sinceridad e interés por otras personas. Si haces evidentes tus opiniones y sentimientos a los demás, existe la posibilidad de convertirte en una persona sincera.
Usa afirmaciones positivas
Si quieres convertirte en una persona sincera, debes buscar siempre lo bueno de las situaciones, en ti y en los demás. Ponte en el lugar de la otra persona y mira de dónde viene. Si surgen connotaciones negativas, utiliza tus afirmaciones positivas para contrarrestar lo negativo y encontrar el lado bueno de cada situación.
Di sólo la verdad
Si te encuentras en una situación que requiere que expreses tus opiniones u ofrezcas cumplidos, pero te sientes obstaculizado por las mentiras blancas, hay una solución para esto: elige la verdad. Por ejemplo, si tienes que dar un discurso sobre alguien que apenas conoces, elige al menos 3 cosas que sepas que son buenas de esa persona e intenta desarrollar tu discurso en torno a esos puntos buenos. Esto puede ayudarte a hablar desde el corazón.
Entiende que la sinceridad puede exponerte
Abrirte a alguien sobre tus sentimientos, aspiraciones y motivos puede hacer que una persona reaccione de forma poco sincera. Si conoces esta posibilidad de antemano, entonces será menos chocante.
Mantén la calma y la no confrontación ante este tipo de respuestas. Hay algunos motivos como la ira y la inseguridad que esconden la incapacidad de algunas personas para enfrentarse a la sinceridad, por eso abusan de ti por ello.
Sé carente de necesidad material
La necesidad material destruye la sinceridad porque siempre te centras en proteger tus propiedades y en aspirar a conseguir más en lugar de mirar a tu alrededor a la comunidad humana. Aprende a carecer de necesidad material y abre tu corazón a tu comunidad. De este modo, la sinceridad se convierte en una segunda naturaleza.
No pulas las respuestas
La sinceridad tiene que ver con la espontaneidad, la inmediatez, las decisiones impulsadas por el momento, que surgen de tu ser genuino. Si pules las respuestas, ya sea por carta, por correo electrónico o al hablar, eliminarás la sinceridad y la reemplazarás con capas de intento de perfeccionismo, de precaución e incluso de endulzamiento. Es fácil detectar la diferencia entre conseguir ese trabajo, conseguir que el plazo se desplace y conseguir esa comprensión que necesitas.
Todas estas son formas de ser una persona sincera. ¿Quieres convertirte en una persona más sincera? ¿Por qué? Comparta su opinión, por favor.1