6) Averigüe cuánto gana su cónyuge
Si es posible, es una muy buena idea averiguar exactamente cuánto dinero gana su cónyuge. Si tiene un trabajo que paga un salario regular, busque un recibo de sueldo.
Si su cónyuge trabaja por cuenta propia, tiene un negocio o recibe cualquier parte de los ingresos en efectivo, haga todo lo posible por llevar un registro del dinero que ingresa durante unos meses.
Desgraciadamente, es muy común que uno de los cónyuges intente ocultar al otro la cantidad que realmente gana para reducir la cantidad percibida disponible para la manutención de los hijos y la pensión alimenticia.
7) Evalúe su potencial de ingresos
Si ha estado fuera de la fuerza de trabajo durante un largo periodo de tiempo, es una buena idea hacerse una idea de cuánto podrá ganar si se reincorpora al mercado laboral.
Su potencial de ingresos será probablemente un punto clave de contención durante el proceso de divorcio, por lo que es una buena idea estar familiarizado con su situación.
8) Conozca su historial y calificación crediticia
Si cree que es probable que se mude del hogar familiar, es crucial conocer su historial de crédito y su calificación crediticia actual. Es casi imposible adquirir un lugar para vivir, un coche nuevo o, a veces, incluso un plan de telefonía móvil sin una buena calificación crediticia.
Si tiene un mal crédito o no tiene historial crediticio, cuanto antes empiece a tomar medidas para remediar la situación, mejor.
9) Empiece a ahorrar dinero
Siempre debe tener acceso a ahorros propios. Si su cónyuge se muda y deja de pagar las facturas, tendrá que pagarlas hasta que se pueda dictar una orden de manutención temporal.
Si es usted quien va a solicitar el divorcio, necesitará dinero para un anticipo. Empiece a ahorrar ahora y planee iniciar los procedimientos de divorcio cuando haya acumulado una reserva fiable.
10) Dé prioridad a sus hijos
Recuerde: sus hijos no se están divorciando, usted sí. Es muy importante mantener su seguridad y protección en la parte superior de su lista de prioridades en todo momento. Si tiene previsto pedir la custodia compartida o exclusiva, debe hacer todo lo posible por mantenerse activo en la vida de sus hijos en la medida de lo posible.
No hable mal de su cónyuge delante de sus hijos, e intente evitar discutir con su cónyuge delante de ellos si es posible.